Por el Futuro de Uribante

23.02.2012 12:59

 

POR EL FUTURO DE URIBANTE

 

 

          Por todas partes se escucha que la gente del Municipio Uribante ha sido luchadora y bravía, aguerrida y justiciera, honesta y trabajadora, progresista y visionaria, decidida y valiente. Los hechos y las circunstancias históricas permiten sostener esta tesis, entendiendo que las distintas generaciones de uribantinos, a pesar de las dificultades, han sabido emprender iniciativas de carácter progresista en diferentes épocas. Con ello se logra mostrar el material con el que nutre la conciencia de los hijos de esta tierra.

          La historia registra la indeclinable y firme capacidad de sacrificio de los “Chácaros”. Ese es el material fecundo con el que se labra y esculpe el alma de los uribantinos. Pero resulta un contrasentido quedarse rezagado en la simple exaltación de las virtudes y proezas de las generaciones predecesoras. En los tiempos que aún faltan por llegar, existen muchas metas y propósitos que requieren la voluntad y fuerza humana de quienes siguen comprometidos en la lucha por la reivindicación de los derechos y los sueños.

          El Municipio reclama liderazgos capaces de superar la mezquindad aldeaniega y parcelaria, para enfrentar con éxito los retos de los nuevos tiempos. Algunos seguramente piensen en el desenlace de las coyunturas políticas que se avecinan en el presente y siguiente año. Ese es, precisamente, el error en que todos caemos, cuando la cuestión se reduce a una postura maniqueísta, para dilucidar entre el bien y el mal, aunque ningún bando se reconoce como representante de la negación.

          La crisis de liderazgo es reflejo exacto de la crisis de ciudadanía. Personalmente, no creo en el axioma determinista, fatalista y negativo de que los pueblos tienen los gobernantes que se merecen. Tampoco creo que la expresión única del problema sea de carácter político. Las demás ramas del quehacer local también reclaman el impulso de gente creativa, dispuesta a luchar y respaldar iniciativas de progreso y avance social, humanístico y moral. ¿Será más bien una crisis de hombres?

          Se trata de un imperativo de carácter comunitario. Es muy fácil achacar las culpas a los demás, exagerando lo que ellos han dejado de hacer, cuando no se asume con responsabilidad la falta de impulso propio. No hace falta estar en ninguna posición de comando para contribuir a forjar el Uribante posible que todos queremos. Pienso en el esfuerzo creativo y cotidiano de los hombres y mujeres que se esfuerzan por el progreso, sin que ello implique ninguna búsqueda de reconocimiento social.

          El mejor aporte que todos podemos hacer es producir y crear aquello que cada quien sabe hacer muy bien. El futuro de Uribante depende de todos, no sólo de los gobernantes. Obviamente, ellos tienen la tremenda responsabilidad de direccionar el destino de esta tierra. Pero nosotros tenemos la obligación de atajar las equivocaciones y distorsiones, asumiendo el verdadero rol de ciudadanos. Es decir, poniendo granos de arena desde distintas instancias para que Uribante crezca y se consolide.

José de la Cruz García Mora

Cronista Oficial de la Ciudad